Declaración de la AIETS sobre la dignidad humana

 

La Asociación Internacional de Escuelas de Trabajo Social (AIETS) está comprometida con un mundo justo e inclusivo y respalda la dignidad humana como un valor de trabajo social y un derecho humano que se refleja en los programas de educación de trabajo social, en las estrategias y políticas educativas y en la investigación.

La AIETS está comprometida con la inclusión mediante el tratamiento de todas las personas por igual y con respeto para que se sientan valoradas, incluidas, con un propósito, y su bienestar promovido. La dignidad humana es considerada como inherente a todos los seres humanos. Ser tratados por igual y con dignidad es el fundamento de los derechos humanos. Es el derecho que todas las personas tienen a ser respetados porque son seres humanos; sin distinción de clase, raza, género, nacionalidad, cultura, orientación sexual, educación, religión o cualquier otra división. La dignidad humana no se debería tener que ganar, es inherente al ser humano.

La dignidad humana significa la libertad de asociarse políticamente, espiritual, social, o íntimamente con un sentido de responsabilidad y respeto, con quien uno elige en base a las capacidades o a las opciones de uno, y tener la propia individualidad, identidad y asociaciones respetadas sin temor a la interferencia negativa de grupos sociales o autoridades políticas.

La AIETS reconoce la importancia de que las personas ejerzan sus derechos y cumplan sus responsabilidades sin infringir las de los demás. Esto requeriría la consideración de los posibles efectos sobre los demás a todos los niveles – desde el interpersonal hasta el internacional.